Para comenzar el año 2019 quiero compartir con ustedes la historia de Marcelino. Marcelino me visitó en la oficina con su esposa el 14 de febrero de 2018. Ha logrado cambiar varios hábitos para mejorar su estilo de vida y alcanzar su meta. Aquí les dejo su relato en sus propias palabras:
«Escribo esta experiencia de vida con el único interés de poder ayudar a otros a que tomen el primer paso para que conozcan más sobre sus hábitos alimenticios. Nunca es tarde para aprender cosas nuevas…
Desde muy joven pesaba sobre 300 libras y a través de los años había tratado sin mucho éxito varios métodos para perder peso. En dos ocasiones busqué ayuda profesional y logré perder muchas libras, pero en muy poco tiempo volvía a ganarlas rápidamente. Con la llegada de un nuevo año me prometía perder peso, pero según pasaban los días la promesa se iba olvidando. Con el sobrepeso y el pasar de los años, mi salud empeoraba; alta presión, apnea severa, niveles de azúcar y colesterol altos, dificultad para caminar y muchos otros problemas. Ya había cumplido 57 años, pesaba 360 libras y el deseo de perder peso ya no pasaba por mi mente.
Momento de Cambio
Mi esposa quería perder un poco de peso y me pidió que la acompañara a visitar una nutricionista, la Lcda. María Eugenia Rodriguez, que le había recomendado su doctora. Al mismo tiempo, mi padrino de 77 años me invitó a caminar con él por las mañanas. No sabía en ese momento que estas dos simples acciones serían los primeros pasos para modificar mis hábitos alimenticios y lograr perder peso de manera saludable y sin pasar hambre.
Combinación Explosiva
El conocer como los alimentos interaccionan con mi cuerpo, el incorporar actividad física regularmente en mi vida y el contar con el apoyo de otras personas (un “partner”) fueron, en mi opinión, los elementos necesarios para lograr una transformación en mí que nunca antes había experimentado.
La Nutricionista «Método Inverso»
Aunque la función del nutricionista es educarnos sobre la ingesta de alimentos y sus propiedades alimenticias, un factor clave para haber logrado reducir de peso fue la manera en que nuestra nutricionista trabajó con nosotros. Desde el primer día, ella se tomó el tiempo de conocer cuáles eran nuestros hábitos alimenticios con mucho interés y detalle. Conociendo estos hábitos pudo recomendar cambios sutiles que pudimos implementar con poco esfuerzo y de esta manera alterar comportamientos de toda una vida. En otras palabras, en vez de darnos una clase de nutrición nos ayudó a que reconociéramos aquellas malas prácticas que eran la causa para nuestro sobrepeso y como lograr modificarlas poco a poco. No solo nos orientó profesionalmente durante los pasados meses, sino que también se convirtió en nuestra mentora y coach.
Actividad Física es Necesaria
Durante mi infancia, como la mayoría de los niños de mi barrio, hacía actividades físicas regularmente como correr bicicleta, jugar baloncesto y pelota, etc. Sin embargo, desde la escuela superior hasta hace muy poco tiempo, la actividad física en mi vida diaria era «ninguna». Al mismo tiempo que visitamos al nutricionista empecé a caminar varias veces en la semana, aproximadamente 1 hora de 3 a 4 días a la semana. Al iniciar estas caminatas y modificar la cantidad y calidad de mis alimentos empecé a perder peso poco a poco.
Es más Fácil entre Dos y ¡Mejor con Tres!
En mi caso particular, el contar con el apoyo de varias personas para facilitar cambios en mi comportamiento fue una parte bien importante. Básicamente, mi esposa y yo comíamos los mismos alimentos y si salíamos a comer seleccionábamos platos más nutritivos. También el tener compañía para ejercitarme fue bien valioso para mí.
Esta es mi Fórmula… ¿Cuál es la Tuya?
Luego de 11 meses he perdido más de 90 libras y sobre 12 pulgadas de cintura. Como notarás, en ningún momento estoy recomendando que hagas dieta, o que comas cierto tipo de alimentos. Tampoco te digo que camines 3 millas diarias o vayas al gimnasio cada 2 días. ¡Ese no es mi mensaje! Solo quiero que comprendas que todavía puedes. Si yo pude…tú también puedes modificar tus comportamientos alimenticios e incrementar tu actividad física y simultáneamente perder peso «poco a poco» y saludablemente.
Arriba te narré los pasos que tomé, si lo deseas puedes adoptar algunos de ellos o todos…tú decides. No lo dejes para mañana, ¡empieza ahora! Es cuestión de cambiar hábitos poco a poco. ¡Levántate! Sal de la rutina diaria y has un poco de actividad física diferente a la habitual. Empieza un diario y anota lo que comiste y sus cantidades. Anota el tiempo de actividad física. Pésate periódicamente y ponte una meta realista. Busca apoyo y no dejes de consultar al nutricionista.
Recuerda que los grandes cambios no pasan instantáneamente. No lo veas como un sacrificio. Son ajustes necesarios para ganar salud. ¡Voy a ti! »
Recibido: 27 de diciembre de 2018
Gracias Marcelino por compartir tu experiencia. Yo también ¡voy a ti y a tu esposa! ME